Ya podéis ir guardando bajo llave los maravillosos, increíbles e irrepetibles recuerdos de sus conciertos, porque no habrá más. Bueno sí, en unos meses tienen una cita con la Wilde’O Party de México (ya estamos mirando cuánto cuestan los vuelos), pero después… se acabó. No es la primera vez que se genera cierta incertidumbre al respecto, pero… así nos lo confirma nuestro héroe y amigo Juanito Wau, que nos ha dado permiso para comunicároslo: «Sí, es oficial, y caballero… El último viaje será el año que viene a México. No pasa nada, las cosas se acaban y ya está».
Quedan atrás 12 años de conciertos, grabaciones, brindis al dios Link Wray y abrazos por doquier, en los que han dejado una huella tan profunda que sólo asomarse a ella da vértigo. Juan ha sido el mejor front-man de la historia del rock’n’roll, y los Arrrghs! son nuestra banda española favorita de todos los tiempos, la más apabullante y exquisita, la más cercana, divertida y real que hayamos visto sobre un escenario. La mejor.
Fue en 2003 cuando tres miembros de The Pissmakers, Bola, Ramón y Claudia, el batería Fletán y el vocalista Juanito Wau se unieron para darle vida a la criatura. Tras debutar teloneando a Tuna Tacos con un repertorio de originales y versiones de joyas ocultas del garage, lanzaron su primer EP editado en vinilo por Kawanga Records, y ese mismo año participaron en el Wild Weekend de Benidorm.
En 2004, tras un cambio de formación empiezan a salir fuera del país, y dejan alucinados a los Black Lips (en esta entrevista que les hicimos aseguran que son su banda española favorita) a su paso por Francia, Bélgica, Holanda o Alemania.
El icónico «Cantan en español» sale en 2006 como debut en largo bajo el paraguas de Voodoo Rhythm, en 2007 dan un show tremebundo en el Funtastic Dracula Carnival de Benidorm, y tras pasar 2008 arrasando con multitud de salas, vuelven al estudio para entregar el superlativo «¡¡¡Viven!!!», publicado por Munster Records a principios de 2009.
Europa, Estados Unidos, México y Puerto Rico reciben a la tropa Arrrghs, y en 2010 se lo toman con calma, relativamente: dan veladas impresionantes en eventos como el Euro Yeyé, y vuelven al Funtastic, esta vez junto a sus queridísimos Los Saicos.
En 2011 Belinda sustituye a Isidro a los mandos del órgano Vox, y el grupo se embarca en una nueva y extensa gira española (aquí una crónica de su paso por Clamores) plagada de buenos momentos, que cargan las pilas a la banda para lo que vendría después: el soberbio tercer disco «Todo Roto». Que por supuesto, tuvo su pertinente giraza (aquí una crónica de su paso por El Sol).
Los surcos de este vinilo vuelven a situarlos en la primera línea de atención para los amantes del garage, que se arrodillan con sólo oír su nombre, y la escena entera los reconoce como una piedra de toque, un astro de cuya luz se alimentan docenas de bandas jóvenes «dispuestas a hacer el mal», como nos dijo Juanito en esta última entrevista.
Recuerdo aquella divertida charla con Beli en la puerta de Siroco (después les perseguimos hasta Vitoria para verles otra vez de empalmada), o esa noche de copas con Juan en un Go Sinner Go! en Toledo, o cuando entramos a la sala But justo cuando empezaban a tocar, él nos vio, nos guiñó el ojo y dijo por el micro: «Bueno amigos, como veis… he reunido a la banda» (casi nos derretimos)… y la pena por su adiós se mezcla con la sensación de haber tenido la suerte de haber podido darle un mordisquito a su historia. Si se te presentó la oportunidad de verlos y la desaprovechaste, arrepiéntete, pecador. No te imaginas cómo la has cagado…
En fin… mientras nos secamos las lágrimas recordando tantísimas emociones compartidas, tantos bailoteos de pura felicidad y fraternidad, tanta buena música, os dejamos con aquel lema de vida que nos enseñaron, y que ojalá se cumpla:
No se dice adiós… se dice a Link Wray.
