Decía hace relativamente poco que quería apartarse de los escenarios por un tiempo para disfrutar de su mujer e hija, y de paso intentaría aprender a tocar la guitarra. Ese es Coque, un tipo con sentido del humor, y al que el tiempo ha sabido perdonarle los excesos y compensarle por los posibles errores.
Ha probado con todo tipo de composiciones y estilos, aunque por sus venas el rock´n´roll es lo que alimenta sus pasiones. Ha mamado de David Bowie, de Lou Reed, y se ha declarado fan de los Rolling en general y del inmortal Keith Richards en particular.
El pasado 9 de abril volvía a su segunda casa, la sala Joy Eslava, que había colgado el sold out desde hacía meses. Esta vez para presentar su último largo “El último Hombre en la Tierra”.
Esta gira que empezó el pasado marzo, durará hasta finales de mayo por territorio nacional para luego embarcarse hacia México y continuar allí su espectáculo.
Con su fiel escudero David Lads a los teclados, Gabriel Marijuán a la batería, y Héctor Rojo al bajo y Toni Brunet a la guitarra comenzaban la noche con “La Señal”.
Repasando temas de trabajos pasados y del reciente, Coque fue cambiando de estilos y géneros, con su voz particular y sus gestos tan característicos sobre el escenario.
‘Escúchame’, ‘Lo hago por ti’, ‘El último hombre en la Tierra’ o ‘Cachorro de león’ fueron las elegidas del reciente trabajo. ‘Moneda’, ‘She is my baby’, ‘Berlín’ o ‘La carta’ fueron siendo entrelazados con destreza a medida que iba avanzando la noche.
Su homenaje a Bowie con ‘Heroes’ dejó a la sala enmudecida, dando paso a temas como ‘Me dejó marchar’, “At the movies’ o ‘She understands’.
‘No puedo vivir sin ti’ era la última antes de dar paso a los bises, un ronaldeño ‘Guárdalo’, ‘My beautiful monster’ y una obra maestra daba por finiquitado el evento: ‘Despierto’.