Cubano de concepción, neoyorquino de nacimiento, Walter Salas-Humara fue uno de los músicos más sustanciosos de mediados de los ochenta en la costa este de EE.UU. al frente de The Silos, la mejor banda emergente de 1987 según la revista Rolling Stone, y poseedora de una larga discografía que se detiene en «Florizona», de 2011. Aquel disco que puso fin al grupo estaba dedicado a su bajista Drew Glackin, fallecido por una enfermedad de la glándula tiroidea. «Despedirme de él marcó el fin de una era para mí. Era una parte enorme de The Silos, y tras su muerte he estado varios años sin salir de gira», dice Walter, que este martes 24 actúa en el Teatro del Arte (21:30, 10€).
¿Qué estuviste haciendo esos años de descanso?
He estado recargando las pilas, dedicándome a la pintura, escribiendo, simplemente viviendo, sobre todo disfrutando del aire libre, esquiando, haciendo trekking, mountain bike, rafting. Me he dado cuenta de que tengo que aprovechar el tiempo que se me ha dado, y vivo en el suroeste de Estados Unidos, muy cerca de algunos de los lugares más bellos del mundo.
Presentas «Curve and Shake», tu primer disco solista en casi veinte años. ¿Por qué has tardado tanto? ¿Cómo fue ponerse manos a la obra?
Tras la muerte de Drew me llevó mucho tiempo escribir y grabar nuevo material que capturara mi nuevo estado de ánimo. Al entrar en el estudio
toqué con dos bandas, una muy joven, GrooveSession, y otra muy, muy experimentada, The Jackmormons, y traté de trabajar las melodías lo más posible. Para ello, me obligué a mí mismo a cantar de una manera más compleja.
Tu voz es muy reconocible. ¿Es casi tu principal instrumento para componer, más que la guitarra?
A veces sí. Tengo mucha más confianza en mi voz ahora, y creo que soy capaz de cantar muchos tipos de estilos diferentes, lo que derriba muchas barreras a la hora de componer. Puedo cantar de una forma muy íntima, o gritando muchísimo, con fiereza rockera. Y también puedo cantar al estilo de los musicales de Broadway, cosa que me divierte mucho. Creo que ahí está la clave: si te diviertes, es que algo está sonando realmente bien.
¿Qué recuerdas de tu última visita a nuestro país? ¿Es esta gira más excitante por algún motivo?
He hecho muchas giras en España y siempre es excitante estar aquí, por la pasión que los españoles sentís por vuestra música. La última gira fue con The Silos y fue una experiencia muy indy-rock, ya sabes. Esta gira será sólo acústica, mucho más íntima. Sólo yo, el público y las canciones.
¿Cómo será el setlist?
Incluiré cinco o seis canciones del nuevo disco, más una selección de los clásicos de The Silos que más suelen gustar al público y de los que estoy muy orgulloso. Me hace sentir muy honrado que los fans aún quieran escucharlas. Algunas las he cantado durante veinte años, pero siempre las hago evolucionar, haciendo pequeños cambios en las letras y las melodías a lo largo del tiempo. Por supuesto, también cantaré todos los temas que he escrito en español.
Es que a quien le marcaron The Silos, le marcaron bien. ¿En aquel momento tratabas de ser experimental? ¿O era puro instinto?
Al principio simplemente estaba intentando aprender, crecer como artista. En Nueva York, estaba rodeado e influenciado por bandas muy experimentales, pero yo escribía canciones que, de alguna manera, era tradicionales. Así que el resultado de lo que hacía era «arty», pero también resultaba familiar. Escribía historias fragmentadas, como por ejemplo… el principio y el fin de algo, pero no su desarrollo. Yo venía de una escuela de arte, pero también quería rockear.
Fuisteis considerados una banda alternativa fundamental de vuestra época. ¿Eso llega a apabullar?
Gracias por tus amables palabras. Siempre me he sentido honrado y muy, muy afortunado de que mi música haya llegado a tanta gente en tantos países diferentes. Muy pocos artistas musicales tienen la posibilidad de viajar por todo el mundo cantando sus canciones. Me encanta trabajar, y tengo un oficio genial.
Para ir terminando, ¿qué opinas de la etapa de baja tensión que se ha abierto entre Cuba y EE.UU.? ¿Cuál debería ser el siguiente paso en tu opinión?
Abolir el embargo. Ese es el siguiente paso correcto. Nunca fue una buena idea, y sólo funcionó en contra de los intereses de la gente de EE.UU. y de Cuba. Alimentó la paranoia de Castro y sólo llevo a aumentar una distancia artificial entre los pueblos cubano y americano, que en realidad son muy buenos amigos siempre que sus gobiernos les dejan en paz. Espero que cada vez más americanos puedan visitar Cuba, y que cada vez más cubanos tengan más oportunidades para viajar y más libertades parecidas a las que disfrutamos en la mayoría de los países occidentales. Y espero que puedan hacerlo sin sacrificar sus ideales socialistas, y preservando la belleza de su isla y del bonito y limpio mar que la rodea.
¿Qué es lo siguiente para Walter Salas-Humara?
Ahora mismo estoy pasándolo en grande girando por Europa. Pero también estoy trabajando en dos nuevos proyectos. Uno es la reinterpretación de las mejores canciones de mi catálogo. La primera colección incluirá mis canciones más tempranas, arregladas para voz, piano y cuerda. Se titulará «Work Part One». Las siguientes colecciones serán «Work Part Two» y de ahí en adelante. El otro proyecto es un disco de canciones completamente nuevas. He grabado algunas durante la primera pata de esta gira, y las estaré tocando en España. También me gustaría encontrar la manera de poder dar un concierto en La Habana este 2015. Eso sería genial.
FECHAS DE LA GIRA ESPAÑOLA DE WALTER SALAS-HUMARA
23 de febrero de 2015: Ourense, Café & Pop Torgal (SON Estrella Galicia)
24 de febrero de 2015: Madrid, Teatro del Arte (SON Estrella Galicia)
25 de febrero de 2015: Donostia-San Sebastián Cofradía Vasca de Gastronomía
26 de febrero de 2015: Zaragoza, La Lata de Bombillas
27 de febrero de 2015: Barcelona, Almo2Bar
28 de febrero de 2015: Hostalets de Balenyà, Teatre Ateneu
1 de marzo de 2015: Bilbao, La Ribera
AMPLIACIÓN DE LA ENTREVISTA PUBLICADA POR NACHO SERRANO EN ABC
