Género: Pop
Sello: Chitón
6/10
Nos encontramos ante una propuesta, cuanto menos, peculiar. “Recuerdos del futuro” se presenta ante los ojos como un disco cuyo título, diseño y concepto evocan claramente una banda de rock alternativo o progresivo, pero sin embargo, al pulsar el “play”…
¡Sorpresa! Ante nosotros se nos presenta un álbum en el que, a pesar de presentarse muchos elementos muy variados, prevalece claramente el Pop, y que no suena a “grupo” sino a artista individual, chocando estrepitosamente con las expectativas creadas. (Cosa que no tiene por qué ser mala, ojo)
Eduardo Zublaur demuestra un peculiar estilo, tanto vocal como compositivo. Los temas de este disco abarcan desde rasgueos que recuerdan a la rumba (“Ser o No Ser”, “Tanto te Dirán”) como elementos claramente pop, guitarras rock e incluso riffs con “delay” al más puro estilo rock alternativo (“Doble Filo”), eso sí, nunca mezclando todo esto en una sola canción, sino dividido en los distintos tracks. El resultado es un trabajo que varía muchísimo de tema en tema. En cuanto a nivel vocal, Eduardo hace un buen uso de la melodía, recordando a veces a Pau Donés, en ocasiones a cantautores españoles clásicos y en alguna otra ocasión, debido sobretodo a algunos giros vocales, a cantantes melódicos italianos de los años setenta. En resumen, una mezcla muy variada que deriva en un estilo bastante original.
Tal vez uno de los puntos flacos de “Recuerdos del Futuro” sean las letras, que al igual que la música, se mueven en un gran abanico estilístico y cualitativo. Aer en ocasiones se muestran impecables líricamente, y en otras dejan “perlas” como “Ya no me compro el coche, ya no refuerzo mi mal” o “Y eso que parecías tonta, aprendiste Latín”; y el problema no son estas frases en sí, sino el hecho de que en su contexto musical simplemente no acaban de encajar.
En definitiva, “Recuerdos del Futuro” es un disco de contrastes que incluye tanto canciones que no entusiasman demasiado como pequeñas maravillas como “Doble Filo”; un magnífico tema “in crescendo” con un precioso riff al más puro estilo “Let Down” de Radiohead. Lo mismo se puede encontrar rock, que pop o rumba, lo que por una parte hace que el disco sea rico en cuanto a variedad, pero por otra que carezca de un estilo propio marcado. Hay calidad, hay buenas ideas y originalidad pero parece que aún no está todo completamente asentado.
