Amantes de la psicodelia, de la música alucinada, de las sonoridades evocadoras y bellas, no os perdáis a este formidable grupo catalán llamado Aleppo Pine, porque os van a dar lo que buscáis. Saben lo que hacen, conocen su medio y saben hacerlo notar, porque cualquiera de sus canciones no desentonaría en una recopilación de psych-folk de los 60. Y es que el feeling que transmite «Holy Picnic», su primer disco, transporta a otra época en la que el misticismo mandaba. ¿O era otro lugar?
Soy muy fan del psych-folk de los 60 y creo que vuestras canciones son fantásticas. ¿Creéis que estáis en un gran momento como banda? ¿Creéis que podéis ir mucho más allá?
Enric Chalaux: Actualmente, estamos mejor que nunca. Tenemos un set de sonoridades amplio y estamos en un buen momento creativo, tenemos pensado grabar un próximo disco.
¿Sois de los que gusta de excavar hondo para encontrar grupos raros de folk? Si las conocéis, ¿qué os parecen bandas como Comus o Aphrodite’s Chid? ¿qué bandas oscuras os parece un pecado no conocer?
¡Exacto! Esa pasión por descubrir y coleccionar discos raros es conjunta y viene desde hace tiempo. Comus fue una banda pionera en mezclar guitarras acústica con theremin, en Magic Dolmen usamos esa misma formula. De Aphodite’s Child tienen esas composiciones únicas, muy frescas a dia de hoy, además usan de forma particular el órgano Hammond. Otras bandas que se deben escuchar son Affinity, Dando Shaft, Magic Carpet, Fatt Mattress, Hapash and The Coloured Coat, Friar Tuck, The Nazz, Kaleidoscope, Elephant’s Memory. Actualmente nada me parece más grande que Tame Impala, esa nueva banda de jóvenes australianos esta revitalizando la psicodelia como nadie. Su primer disco «Innerspeaker» fue toda una revelación creativa. Dungen, Espers y Vetiver también me encantan.
¿Cómo se formó la banda? ¿Qué experiencias previas tenían los miembros del grupo?
Aleppo Pine es una aventura muy larga, ha pasado por la banda mucha gente. En un dia de 2009, se me ocurrió crear una banda psicodelica desde la perpectiva folk, nació de forma espontánea, comencé a tocar con mi guitarra acústica en mi habitación y compuse en unos días los bocetos de las canciones que aparecerían en Holy Picnic. Con la ayuda de otros músicos se logró comenzar a dar cuerpo a las canciones, con fe ciega y un entusiasmo extremos. Tuvimos una primera etapa folk, una segunda folk rock y ahora estamos en una etapa donde predomina el rock. Mi experiencia venía sobretodo de Stay, banda indie donde fui muy feliz, grabamos dos discos geniales e hicimos mucha carretera.
¿Qué discos han marcado vuestra alma musical, para haber creado Aleppo Pine?
El primer disco de Quintessence, The Piper Gates of Dawn The Pink Floyd, Fifth Dimension de The Byrds Sunshine Superman de Donovan, toda la etapa de Tyrannosaurus Rex, El primer disco de 13th Floor Elevators, In Search Of The Space de Hawkwind y everybody knows this is nowhere de Neil Young entre muchos otros.
¿Cómo surgió la idea de llamaros Aleppo Pine?
Estuvimos varios días buscando nombres, hoy en día es casi imposible encontrar uno que no se lo haya puesto otro, y dimos con Aleppo Pine, fue Toni ex miembro del grupo quien propuso ese nombre.
¿Cómo fue la grabación de vuestro debut oficial?
Dura y larga. Estuvimos muy metidos,fue un trabajo artesanal de 6 horas al día de media, cuidamos mucho el detalle y buscamos un sonido original y orgánico.
¿Cómo se desarrolla vuestro proceso creativo? ¿Hay algo en común en el nacimiento de todas vuestras composiciones?
Normalmente y creo que en el 100% de los casos un músico trae unos acordes y de allí se extraen los mútiples arreglos.
Por lo que he visto en la portada, un “Holy Picnic” tiene pinta de tener algo de psilocibínico… ¿me equivoco? ¿sois capaces de extraer ideas musicales valiosas de esos momentos?
Cuando he consumido psicodélicos la percepción y la sensibilidad se modifican, a la hora de componer a veces las formas fluyen de una forma abstracta y repetitiva, quizá sean muy utiles para la experimentación pura y dura. De momento no hemos tenido que recurrir a ninguna sustancia, la creamos nosotros mismos. Prefiero usar mi subconsciente para eso, prefiero el surrealismo de André Breton, para tratar de representar mi otra vida onírica, al psicodelismo de Timothy Leary.
Escuchar “Coloured trees” bajo el influjo de alucinógenos tiene que ser abrumador… ¿buscáis crear unas sensaciones determinadas en el oyente con cada tema? La grabamos bajo los efectos del calor insoportable de Barcelona en pleno mes de agosto.
Seguramente, si fumas marihuana y escuchas «Coloured Trees» incrementa la sensación de hipnotismo, podría llegar a ser aun mas hermosa de lo que es…
¿Vuestros conciertos están a la altura del disco? Me refiero a la dificultad de recrear esas atmósferas con los límites que impone el directo….
Hay muchos instrumentos, y algunos no están en directo, intentamos representarlos hace tiempo, llegamos a ser 7 músicos, no funcionó, es demasiada gente. Ahora somos 5 y es mucho mejor. Menos es más.
¿Cuál es el siguiente paso para Aleppo Pine? ¿Cuáles son vuestras aspiraciones a largo plazo?
Nos gustaría tocar por todo el país, e ir a Inglaterra y Alemania. Hacer crecer la banda y tocar cada vez más y en mejores salas.
¿Cómo es vuestra relación con Alone Records? ¿Qué pros y contras tiene estar en un sello como este?
Correcta. Publicaron nuestro disco editaron 1000 copias, nos han abierto puertas para salir en los medios .Estamos tratando de acordar una gira por Inglaterra, ojalá se haga.
«No hay una escena en Barcelona, los precios abusivos en muchas salas estrangulan la música en vivo»
En vuestra opinión, ¿qué significó la revolución psicodélica de los 60? ¿qué aportó a la sociedad el primer movimiento social con esas características?
Intentaron transmitir la revolución de las mentes y las sensaciones. Particularmente me quedo con el ansia irrefrenable de poder cambiar el mundo, de la explosión de los colores en vestimentas y carteles , la revalorización del misticismo y el ocultismo y la salvaje irrupción de la música rock y el arte underground. Acabo estandarizándose, degenerando y muriendo como todo, pero los inicios de aquella cultura hippie debieron de ser terriblemente impactantes. En los 90 vivimos un redescubrimiento y un amor hacia aquella época.
¿Tenéis la sensación de pertenecer a una escena en Barcelona?
Realmente no hay una escena en Barcelona, los precios abusivos en muchas salas estrangulan la música en vivo. El músico debe de pagar para tocar … Todo se basa en sacar el dinero debajo de las piedras, no existe ya una pretensión artisitica por parte de los clubs. Afortunadamente tenemos en nuestras filas, la importante ayuda de Michele Ferrero agitador músical sin limites y es la persona que nos ayuda a encontrar conciertos y reactiva nuestras esperanzas.
www.myspace.com/aleppopine
