Aún resonaban las noticias sobre Nick Cave y su completo en el Ifema de Madrid. En menos de 24 horas Madrid ha dado dos Sold Out en dos de sus auditorios bandera para albergar macroconciertos. El primero, con 14.900 personas. El segundo, en el Barclaycard Center con capacidad para 16.000, fue el elegido por Vetusta Morla para hacer consciente «La Deriva».
Después de conseguir Disco de Oro por su tercer largo, premiados por la Música Independiente a: mejor artista, álbum, canción por «Fuego», directo, producción, fotografía y diseño gráfico; Vetusta Morla eligió por fin el estadio en la Plaza de Dalí. Siempre había llenado varios días seguidos otros míticos como La Riviera (en 2014 colgaron el cartel de entradas agotadas 5 días), pero obviamente con menos aforo, unas 1.800 personas. Han sabido elegir el momento adecuado para cada paso en su carrera, y el 23 de mayo era una noche idónea para otro pequeño paso hacia arriba.
Puntuales, y siguiendo el guión establecido, a las 22:00 el sexteto salían a escena potentes, directos. La canción «La Deriva» abría la lata de los 24 temas elegidos en un repertorio con el que hicieron gala de sus 17 años de formación.
Gran despliegue de medios técnico y humano, que aunque se han oído quejas sobre la resonancia en algunos puntos, no creo que manche el recuerdo de un noche memorable, antesala a un cambio político trascendental e histórico en la capital. Y Pucho no quiso pasar la oportunidad de remarcar el momento decisivo en el nos encontrábamos. Tras interpretar «Lo que te hace grande» y «Golpe Maestro» exclamó: «No nos merecemos un presidente que hable por los televisores».
¿Qué harías tú pudiendo ser
la disección de un bisturí?
Si pudieras rozar
antes de prohibir,
los laberintos del jardín.
Sin duda, los tricantinos saben manejar como pocos las greguerías, metonimias, metáforas y demás tropos lingüísticos. Por esto, y por la peculiaridad de Pucho (que a mí personalmente me recuerda a Enric de StandStill, me lo haré mirar…); por tantos años en los que se han subido juntos a un escenario, por salvaguardar como nadie su identidad, y por no querer correr sin saber andar, consiguen lo que tienen. Y tienen decenas de miles de personas a sus pies coreando durante dos horas y media canciones que ya son himnos.
Ahí es nada. Y recordemos que siguen siendo parte del formato independiente («indies» para mí es más un error de apoderamiento genérico social que un estilo musical).
«Cada cual que tome sus medidas.
Hay esperanza en la deriva«.
SET LIST:
La deriva
Lo que te hace grande
Golpe maestro
La mosca en tu pared
Pirómanos
Boca en la tierra
Fuego
Rey sol
Cuarteles de invierno
Al respirar
Copenhague
Baldosas amarillas
Sálvese quien pueda
Tour de Francia
Un día en el mundo
Saharabbey Road
Maldita dulzura
Mapas
Fiesta mayor
La cuadratura del círculo
Bis:
Año nuevo
Valiente
El hombre del saco
Bis 2:
Los días raros
