Crítica – IRON MAIDEN “The Final Frontier”

por

Sello: EMI

Género: Heavy Metal

PUNTUACIÓN: 7

“Fear of the dark” puso el punto final a una etapa de éxito titánico en el heavy metal. Después llegaría el cambio de sonido y de cantante –éste temporal-, el adiós a los números uno, y sucesivos intentos por recuperar la garra compositiva. Pero ahora que sus fans empezaban a escamarse, dan un golpe de autoridad haciendo de su disco más largo (76 minutos) uno de los mejores de su carrera. Un bajo distorsionado y una batería reverberante cuasielectrónica abren “The Final Frontier”… un susto de aúpa. Pero a partir de ahí, el disfrute clásico se apodera de estos diez temas que saben pararse en los límites de lo progresivo, con cabalgadas y dobles punteos al dente para convertirse en himnos y una muy agradable –aunque intermitente- capacidad de sorpresa rítmica que denota responsabilidad por huir de lo facilón. Algunos fraseos vocales demasiado estandarizados en el género pueden provocar desgana en los no fans, pero sin duda este es un disco donde buscar razones para convencerse de que son unos gigantes indiscutibles.

La portada ha sido muy discutida, de hecho se ha recordado que ya se empleó una idea similar en “Somewhere in time”, pero ¿acaso no hay otras portadas muy parecidas entre sí en la primera época, en cuanto a “idea”? Hay una edición en lujosa caja metálica que incluye un libreto de 16 páginas a color, y contenido exclusivo a través de un CD que da acceso a un site privado con material extra: una entrevista en profundidad a Iron Maiden, el video-juego The Final Frontier “Mission II: Rescue & Revenge”, fondos de pantalla, fotos y otros contenidos inéditos. Y por supuesto, también hay una edición limitada de doble vinilo “Picture”, con gramaje de alta calidad.

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