El barrio de Malasaña se convirtió este fin de semana en un auténtico hervidero musical donde centenares de personas fueron sido testigos de la gran y salvaje fiesta musical que es GetMAD! Festival. El viernes, desde primera hora la sala But by Budweiser acogió el grueso del público de la mano de directos frenéticos a modo de declaración de intenciones del espíritu GetMAD!, como los de No Joy o Nudozurdo. Abanderados de la escena post-punk, los británicos Wire hicieron eclosionar la sala cerca de las nueve de la noche con un concierto enérgico repleto de grandes temas de álbumes imprescindibles en su carrera como “Pink Flag” o “Chairs Missing”. Sin duda, una auténtica explosión que el público supo recibir con el entusiasmo de quien asiste a un concierto único.
Tras ellos, y continuando con la presencia de sonidos oscuros y místicos, el californiano Luis Vásquez, al frente de The Soft Moon, cerraba la sesión poco antes de medianoche con un directo incendiario de post-punk y krautrock, creando una intensa atmósfera con clímax en temas como “Dead love”.
Mientras tanto, en la sala Taboó Radio 3 Getmad! Shuttle, Abigails sorprendían a los asistentes llevando al directo a primera de la noche su country más oscuro y desesperanzado con la profunda e intensa voz de su frontman Warren Thomas, que demostró la calidad que desprende esta banda surgida de una escisión de los Growlers.
Como ellos, el también jovencísimo cuarteto fémino Nots revolucionaba al público con un sorprendente e irrepetible concierto en el que potentes riffs de guitarra se mezclaban con sintetizadores y unos imponentes alaridos vocales que evidencian la fuerza y madurez de una banda que hasta ahora solo cuenta con un LP y algunos singles a sus espaldas. Para muestra, temas como “Reactor” o “Black Mold” con los que dinamitaron definitivamente el espectáculo.
Mientras, buscando el equilibrio en los sonidos más feroces y underground, GetMAD! exprimía su lado más duro en la sala Changó Live! By Budweiser. Tras el apabullante concierto de unas Lizzies que demuestran en cada concierto por qué son ya una de las realidades más palpables del hard-rock nacional, pasadas las diez de la noche se subían al escenario las míticas hardrockers Girlschool. Hicieron testigo al público de las armas que las han llevado a convertirse en uno de los nombres imprescindibles del hard-rock europeo. Con temas como “Take It Like A Band” o “Come The Revolution” se metieron al público en el bolsillo, una vez más.
Junto a ellas también ocuparon el escenario de la Changó otra leyenda del género, los Diamond Head. En esta ocasión, las miradas de los asistentes estuvieron puestas en el nuevo cantante de la banda, Rasmus Bom Andersem, que sin duda, dejó a más de uno con la boca abierta con su potente y armado directo.
Mención aparte merece el tempranero concierto de los suecos Imperial State Electric, comandados por el siempre magnético e irrepetible Nicke Andersson.
Paralelamente, desde las 19:15 horas, la sala Maravillas Club by Jägermusic había sido el escenario donde recibir a los estadounidenses y garageros White Fang. Abanderados del sello Burger Records, su directo supuso un auténtico tsunami con miras al punk, el pop y el grunge.
La presencia nacional llegó de la mano de los coruñeses Fogbound que trasladaron su psicodelia y sus sonidos freakbeat con raíces sixties al Madrid millenial. Junto a ellos, Solids llenaron la sala de sonidos experimentales y post-hardcore que combinaron con el indie-rock noventero de Tomorrow Tulips.
En total, más de mil personas disfrutaron de la primera jornada del festival.
Tan solo veinticuatro horas después de un inicio con auténtica dinamita, GetMAD! explotó el sábado deleitando a los miles de asistentes que han abarrotado Malasaña para ver los directos de grandes y potentes bandas como Black Lips o Rival Sons. A lo largo de más de 8 horas, 17 bandas han pasado por las cuatro salas míticas del barrio madrileño cerrando con gran éxito el segundo y último día del festival.
Desde su arranque a las 17:30 horas, la Sala But by Budweiser recibió a la gran mayoría de asistentes que acogieron entusiasmados el directo repleto de descaro, garage y power pop de los californianos Audacity.
A ellos, los siguieron los ingleses Eagulls que añadieron el toque post- punk a la cita. El plato fuerte vino de la mano de Black Lips. Llegados desde Atlanta, y abanderados del boom punk-rock garagero y la psicodelia de los últimos años, el cuarteto demostró la frescura y la profesionalidad que se esconde tras quince años de experiencia. Y así lo corroboró el público con temas como “Bad Kids”, “Funny” o “Boys in the Wood”, auténticos himnos de la banda.
Tras ellos, la guinda al pastel la pusieron Psychic TV, una de las bandas de rock más influyentes de las últimas décadas. Su icónica líder, Genesis P-Orridge hizo de su directo un auténtico espectáculo donde sonidos industriales se mezclaron con psicodelia y unos visuales apabullantes. Sin duda, transgresión y calidad a partes iguales que provocó el aclamo de los allí presentes.
Paralelamente, el lado más heavy y oscuro de GetMAD! arrancaba en la sala Changó Live! By Budweiser con los gallegos Balmog, veteranos en la escena del black metal. Su cruda puesta en escena combinó con la oscuridad sonora de los suecos No Future. Ellos fueron la antesala a dos de las bandas más esperada¬¬s del festival. Hacia las ocho y media de la tarde, Kory Clarke, el hombre al frente de Warrior Soul, abría con su imponente actitud el concierto de los neoyorquinos, que desde el primer minuto ondearon la bandera del hard-rock y el metal con temas como “Love Destruction” o “Downtown”. Por último, llegó el turno de los más que esperados Rival Sons, uno de los platos fuertes de la programación de esta primera edición que fueron recibidos entre una enorme ovación al salir y que pusieron el listón más que alto presentando los temas de su inminente quinto LP “Hollow Bones”. En su directo, la banda de Long Beach se proclamó como referente indiscutible del rock’n roll con sonidos que oscilan entre el blues, el hard rock y el rock más propiamente dicho. Un show que sin duda supo dejó con ganas de más a aquellos que fueron testigos del espectáculo que dirigía la voz de Jay Buchanan y que hizo retumbar la sala Changó by Budweiser.
Mientras tanto, en la sala Taboó Radio 3 Getmad! Shuttle, Sen Senra y Sex Museum abrían la que sería una noche muy cañera a ritmo de garage y puro rock que dio paso a las nueve y media a los neoyorquinos White Hills. Con un space-rock cargado de energía a partir de bajos, guitarras y sintetizadores, el dueto ofreció un espectáculo donde trasladaron al público a una irresistible e intensa atmósfera futurista.
Tras ellos, White Fence, el proyecto de Timothy Presley, explotaba su garage-pop psicodélico con melodías y riffs arrolladores que precedían precisamente, a otro proyecto personal, esta vez el de Mikey Maramag. Bajo el nombre de Blackbird Blackbird, este joven californiano cerraba la noche en esta tercera sala con su particular dream-pop que hipnotizó a a los allí presentes con instrumentación oscilante entre lo analógico y digital.
A su vez la sala Maravillas Club by Jägermusic se convertía desde las 19:30 horas en el espacio donde disfrutar del espectáculo de los valencianos Odd Cherry Pie con su particular folk aderezado con toques de punk rock. Tras ellos, aparecieron en el escenario los imparables Money for Rope dando lugar a un auténtico viaje adrenalínico aderezado con su particular garage de toques surferos y soul que hizo quemar zapatilla hasta al más tímido con temas como “Easy way out” o “Been in the wars”. Su actuación sería la antesala al cuarteto de power pop australiano The Meanies, que a golpe de punk destapó los temas de su nuevo LP “It’s not me, It’s you”.
El plato final fue para Terry Malts, que continuó la sesión de punk-pop y garaje, llenando GetMAD! de fuzz y toques ramonianos.
A lo largo de estos dos días, GetMAD! ha superado el millar diario de “devotos”. Sin duda, un festival que ha dejado en Madrid el mejor sabor de boca repleto de garage, rock, punk y hard rock y que además, retomará su actividad en ciclos mensuales desde septiembre de este año hasta 2017, cuando se celebrará su segunda edición.