MAMÁ: «Hemos hecho lo que nos ha dado la gana»

por

Precursora de la Nueva Ola madrileña, fue una de las bandas que instituyó, durante los 80, el sonido pop de guitarras que luego ha tenido tan feliz desarrollo. Sin embargo, Mamá solo estuvo en activo cuatro años, socavado por las clásicas rencillas internas y unas producciones que no estaban al nivel que ellos demandaban. Tras la remasterización de sus antiguas canciones, en 2009 regresaron con «La Mejor Canción», disco que ha tenido su continuación ahora con «Soloo por hoy», editado por Rock Indiana. Carlos Rodríguez, Miguel Gutiérrez «Guti» y José María Granados son los miembros originales que mantienen viva la magia: «Había que seguir la rueda», nos cuenta Granados. Los días 15 y 16 de septiembre estarán en la madrileña sala El Sol estrenando sus nuevas canciones.

-¿Qué cambios hay entre vuestro anterior álbum, el del reencuentro, y este?
-En el primero, como hacía tanto tiempo que no tocábamos juntos, no teníamos muy claro el sonido íbamos a sacar, y ahora sí; y, bueno, también hemos hecho un poco lo que nos ha dado la gana. Teníamos un montón de canciones, veintitantas, como en los viejos tiempos, y cogimos catorce. Y creo que ofrecemos también una variedad. Aunque hacemos cosas pop, nos gustan diferentes estilos. Una canción puede ser un poco más dura, otra muy cortita… Un poco lo que nos ha gustado siempre.
-El tema que abre el disco, «Mal de amores», demuestra que el pop habla de sentimientos que no son exclusivos de jovencitos.
-Sí, pasan cualquier edad, pero esa canción es un poco homenaje a nosotros mismos. Es decir, Mamá es así como lo recordáis, y también es así ahora. A la hora de escribir una canción tampoco importa mucho que tengas 20 o 45 años. Eres consciente de lo que estás contando. Si no, nos hubiéramos sentido un poco ridículos interpretándolas en directo. Podría parecer un poco adolescente, pero con la fuerza que las tocamos creo que queda claro que sigue siendo vigente, aunque escrito en otra época. Pasa lo mismo con una canción de Los Brincos, la tocas ahora y sigue vigente, porque la canción es lo que vale.
-El sonido que ayudasteis a expandir, junto con Los Secretos y Nacha Pop, está de plena actualidad…
-Es que hay una tradición que a mí me gusta, y a mucha gente, de pop en castellano, de canciones con una estructura determinada, fuertes, potentes, con guitarras… Han salido cosas muy bonitas en estas décadas, y es lógico que se mantenga porque es una fórmula que funciona. Otros estilos más propios de los 80, más ñoños o a lo mejor con más máquinas, a lo mejor han pasado un poco más de moda, básicamente por el sonido, que ha cambiado.
-¿Han envejecido peor?
-Pues sí, pero por el tipo de producción. Comoestaban empeñados en hacerlas todas con maquinitas…
-¿Cómo te has visto después de grabar varios años en solitario, trabajando en grupo?
-Bien, pero de todas maneras tengo intención de tocar en solitario. Hay muchos temas de mis discos que no estoy haciendo y me apetece hacer algunos conciertos. Pero con Mamá me encuentro muy bien, me gusta mucho más trabajar en banda, sobre todo con Carlos y Guti, que son los que quedamos de entonces, porque la energía es muy contagiosa. No tenemos una edad como para poder arriesgarnos nosotros solos a tirarnos al vacío durante tiempo, sino que está bien compartirlo con otros y darte cuenta de que también los otros sienten esa marcha.
-Hay que tener valor para dedicarse hoy en día a la música, estando como están las cosas. ¿Cómo veis la situación, comparado con los 80?
-Ahora está mucho más difícil todo, la música y el resto. Otra cosa es que un grupo de ahora pueda tener un lanzamiento por internet o lo que sea, potente, que pueda durar un tiempo, pero luego mantenerse lo veo un poco complicado, porque la industria está muy mal, no hay ventas, y no ya por la piratería. Disminuyen las fuentes de ingresos, excepto para tocar en directo, y tampoco es muy fácil tener conciertos, porque muchos ayuntamientos tampoco tienen dinero para pagarte. En ese sentido está más difícil que en los 80, que había más dinero, y más energía para apoyarlo.
-Incluso otro ambiente cultural.
-También, sí, claro. Se valoraba mucho más la música. Se escuchaba menos cantidad de música, pero se apreciaba de otra manera, no era un bien para usar y tirar. Ahora es algo que no tienen más valor, como ocurre con las emisoras estas de «lo mejor de los 80», «de los 70″… y hacen un batiburrillo que al final terminas escuchando la misma canción de cada grupo. Es un poco triste.

Deja una respuesta