Para celebrar que mañana llega el Día de la Música, os ofrecemos tres entrevistas con sendas bandas que participan en el gran festival que se celebrará en Matadero Madrid (toda la info AQUÍ): Mäximo Park, The Raveonnetes y Alejandro Escovedo & the Sensitive Boys (intentaremos pillar por banda a nuestro favorito del festival, Mikal Cronin, allí mismo). Empezamos con el maestro de Texas.
ALEJANDRO ESCOVEDO: «Hace mucho que el punk no es mi estilo, pero sigue siendo mi filosofía»
– ¿Qué te parecen los festivales? ¿Disfrutas más de los conciertos en clubs?
– Creo que el rock’n’roll es un deporte de contacto que se experimenta mejor en los pequeños confines de un club sudoroso, con todo el mundo perdido en una experiencia de rock’n’roll «white light, white heat». Es donde todos nos elevamos hacia otro nivel de existencia, una verdadera celebración.
– ¿En qué momento dirías que se encuentra tu banda, The Sensitive Boys?
– The Sensitive Boys y yo hemos hecho dos discos juntos, y espero poder crear mucha más música con The Sensitive Boys and Girls. Cuando estamos en EE.UU. tenemos dos cantantes: Karla Manzur, que también toca el teclado, y Gina Holton, que también es percusionista. Ha habido algunos cambios desde la última vez que estuve en España. David Pulkingham se ha marchado para emprender una carrera en solitario, y ha sido sustituido por Gabriel GOrdon, que ha tocado con Natalie Merchant durante muchos años, y también con Garland Jeffries y otras bandas de Nueva York. Él es un gran guitarrista y cantante, y ha aportado mucho al sonido de la banda. Nuestro nuesvo batería es Chris Searles, de Austin (Tejas). Ha tocado en el disco «Big Station» y es un tío alucinante, con una nueva energía que le hacía mucha falta al grupo. Bobby Daniel está tocando el bajo y ha estado en mis dos últimos discos, es de Birmingham (Alabama) y está lleno de soul. Un músico muy molón, nuestra arma secreta. The Sensitive Boys han sido una inspiración para mí, son la pareja perfecta para mis canciones y mis sensibilidades.
– ¿Cómo fue el proceso creativo de tu nuevo disco, «Big Station»?
– Chuck Prophet y escribimos diez de las canciones del disco, con Tony Visconti compuse otras dos, y otra más con los Sensitive Boys. Cuando Chuck y yo teníamos escritas «Sally Was a Cop», «Bottom Of The World» y «Can’t Make Me Run» enviamos una demo muy cruda a Jon Landau y nos escribió una crítica muy inspiradora, señalando la perspectiva de alguien que mira a un mundo que ha entrado en un cambio profundo y traumático. Chuck y yo nos dimos cuenta de que había una historia que contar, acerca de un mundo a punto de colapsar, a través de un personaje, Sally, una mujer joven que intenta ayudar a su comunidad pero que es obligada a convertirse en soldado, debido a las atrocidades que ocurren a su alrededor. Otro personaje de la historia le dice: «no te rindas, cree en el amor», en la canción «Can’t Make Me Run». El sonido estuvo inspirado por bandas como Suicide, Rachid Taha,The Clash o LCD Sound System. Quería trabajar con diferentes ritmos y crear algo más que un sólo tipo de vibración para este disco. Tony Visconti hizo un trabajo excelente con las mezclas y la producción. Todo fue grabado en Austin, en el estudio de nuestro colega Jim Eno (Spoon).
– ¿Cómo llevas la relación con las discográficas? Alguna vez has editado cosas por ti mismo…
– Este es mi segundo disco para Fantasy/Concord, y hasta ahora me han apoyado mucho, haciéndome sentir afortunado por tener a un buen grupo de gente trabajando para que mi disco funcione. Respecto al futuro, estoy seguro de que llegará un momento en el que me autogestionaré completamente, y seré independiente de cualquier sello.
– ¿Tienes algún consejo para los músicos que quieran crear una identidad musical muy marcada, como has hecho tú a lo largo de los años?
– Mi único consejo para aquellos que quieran crear un sello distintivo es que escuchen la mayor cantidad posible de música. Hay que tener un apetito omnívoro por la música, los libros, las películas, las pinturas, digerirlo todo y tener siempre un objetivo y una visión inamovible de lo que quieres. Que nadie te diga que algo es imposible. Siempre hay un mar de posibilidades para todo.
«En el Chelsea Hotel, una vez me tiré horas hablando con Sid Vicious y Nancy Spungen en el ascensor»
– Los años del punk-rock ya te quedan lejos, pero, ¿qué permanece?
– El punk-rock siempre ha sido una inspiración para mí, hace mucho que ya no es mi estilo, pero sí sigue siendo muy importante para mí como filosofía musical.
– ¿Te cuesta creerlo cuando se te sitúa en la primera división del rock americano?
– Tengo mucho respeto por los grandes músicos, y debo admitir que a veces soy algo mitómano, especialmente con los que llamo «mis mentores». A veces es muy difícil para mí pensar en Alejandro Escovedo como un tipo que juega en la misma liga que ello… creo que es porque siempre he pensado que si le das vueltas a ese tipo de cosas, dejas de estar atento al verdadero trabajo, que es escribir canciones.
– ¿Has pensado en escribir una autobiografía?
– He empezado a trabajar en ello, con Daniel Wolfe y Dave Marsh, aunque estamos yendo bastante despacio…
– ¿Qué significa para ti el nombre Chuck Prophet?
– Es uno de mis cinco guitarristas favoritos de la actualidad, un gran autor, cantante, y un cuentista, ja, ja. Siempre da unos shows geniales, nunca deja insatisfecha a la audiencia. Es un gran amigo y un gran colaborador.
– Estuviste viviendo una temporada en el mítico Chelsea Hotel de Nueva York. ¿Alguna anécdota memorable?
– Muchas. Una mañana, entré al ascensor para subir a mi habitación, y allí me encontré a Quentin Crisp, Charles James, Sid Vicious y Nancy Spungen. Nos pusimos a rajar de nuestras cosas, y nos divertimos tanto charlando que nadie quería bajarse en su planta, y mantuvimos el ascensor subiendo y bajando durante horas. Al final acabamos los cinco en mi habitación y montamos una juerga tremenda…
En breve la siguiente entrevista: Mäximo Park