20 aniversario de la muerte de FREDDIE MERCURY

por

Sólo un día después de anunciar que padecía de SIDA, Freddie Mercury abandonó el mundo terrenal el 24 de noviembre de 1991 para escalar el Olimpo de los dioses de la música, donde seguro se está corriendo buenas juergas con Elvis y compañía. Hoy, en el 20 aniversario de su fallecimiento, queremos recordarle como más nos gustaba: rockerísimo, con esta Excavación del Día que puede dejar patidifuso a quien no conozca bien los inicios jevorros de Queen: «Modern Times Rock’n’Roll», en un concierto de 1974. Cuando dejaron de tocar así, Iron Maiden, Deep Purple y Black Sabbath debieron respirar tranquilos.

 Mercury falleció a los 45 años en su casa de la lujosa calle londinense de Knighsbridge. Nació en Tanzania, hijo de un funcionario británico, con el nombre de Farrokh Bulsara, y fue criado en la India. En sus tiempos mozos cambió ese nombre difícil de pronunciar por el de Freddie y, cuando ya se dedicaba profesionalmente a la música, sustituyó su apellido por Mercury (Mercurio, mensajero de los dioses).
La carrera de Freddie Mercury, un hombre culto que adoraba la ópera y estudió dibujo y diseño, estuvo siempre unida al guitarrista Brian May y al batería Roger Taylor, con los que formó la banda Smile en 1967, y al bajista John Deacon.
Los cuatro músicos crearon en 1971 Queen y grabaron doce álbumes de estudio, entre ellos los primerizos y aclamados «Sheer Heart Attack» (1974) y «A Night at the Opera» (1975), con un sonido que conjugaba rock, heavy metal y glam, dominado por la guitarra de May y sobre todo por la imponente voz de Mercury.

Dos décadas después de la muerte de Freddie Mercury, sus fans no podrán prestar mañana tributo en ningún cementerio, ya que el cuerpo del cantante fue incinerado en Londres y las cenizas fueron esparcidas en un lago suizo pocos días después.
El día de su entierro su ataúd llevaba una rosa roja encima y en la ceremonia se escuchó la canción «Barcelona», grabada en 1987 por el músico británico con su admirada Montserrat Caballé y que se convirtió en el himno de los Juegos Olímpicos de 1992, cuando Mercury ya había fallecido.

Deja una respuesta