Dolores no es un grupo apto para cualquier oyente. Dolores hace honor a su nombre y sus canciones tienden a tener espinas. Hasta mediados de diciembre es posible bajarse de forma gratuita su álbum de debut, «Disco Póstumo», a través se su página web. Un puñado de composiciones oscuras que se introducen a través de la piel y que ya se postulan para denominarse revelación del año. Su vocalista, Teresa, y su bajista, Juan, contestan a nuestras preguntas.
-¿Cuánto tiempo os llevó conseguir el sonido que queríais? ¿Fue llegando poco a poco o lo teníais claro desde el principio?
-Al principio, a nivel teórico, teníamos claro dos cosas: queríamos bajos saturados y voces vaporosas con bastante reverb. También distorsionadas según la ocasión. Luego van llegando otras ideas a medida que vas componiendo y desarrollando los temas: que si una batería con sonido más sintético y ritmo cortado por aquí, que si menos reverb a la voz en otra canción, etcétera.
-En cada artículo que habla de vosotros, se citan las influencias ochenteras, post punk, The Cure, etcétera. ¿Estáis de acuerdo? Y si es así, ¿cómo llegó esta música hasta vosotros?
-Por supuesto que hemos oído a The Cure, y también a Raphael. Podríamos citar miles de grupos que nos han influido que no tendrían nada que ver con lo que hacemos. Siendo honestos, ni siquiera pensamos en ellos cuando hacemos nuestra música. Sale así. En realidad no creemos que sean tan palpables las influencias ochenteras, puede que en un tema o dos se dejen ver, pero nosotros hacemos música de aquí y de ahora.
-¿Cuáles son vuestras influencias, más allá de las musicales?
-El lacón con grelos, «El descendimiento de la Cruz» de Van der Weyden, punto de cruz y macramé, Margaret Tatcher, Jara y Sedal, David Lynch, Bucarest, los tatuajes carcelarios, las navajas de toledo, Sangchili, los ligueros, el test de Voight-Kampff, los ornitorrincos, los yayos de Casa Camacho, etcétera.
-Esa atmósfera inquietante de vuestras canciones, ¿cómo se vive en vuestros directos?
-Nosotros con mucha intensidad. En directo somos más viscerales que en el disco, con lo que esa atmósfera se torna en sudor e hígado.
-Muchos ojos se han fijado en vosotros, se habla de «disco revelación del año»… ¿Sentís que se os viene encima mucha responsabilidad?
-Igual que un día estás arriba al siguiente puedes caer, pero no depende de nosotros para nada. Solo esperamos que la gente disfrute escuchándolo tanto como nosotros haciéndolo o tocándolo en directo. Si habláramos de un segundo disco sí, desde luego sería una gran responsabilidad hacer un trabajo a la altura o mejor que «Disco Póstumo». Con él hemos intentado hacerlo lo mejor posible.