Que bajar los precios es una obligación queda demostrado por hechos como este. Gracias al abono anti-crisis del festival En Vivo, se han vendido 35.000 entradas (3 días a 35 euros) en sólo un mes, prácticamente la misma cifra que se registró en la jornada más masificada de la primera edición del festival, con una asistencia de 37.300 personas.