Entrevista con JIM JONES & THE RIGHTEOUS MIND: «Yo no necesito descansar»

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jim-jones-and-the-righteous-mindPodríamos relativizar y explicar que la disolución de la Jim Jones Revue hace año y medio se debió a un “cúmulo de factores”, o podemos ser más descarnados y decir que al bueno de Jones le dejaron tirado. En cualquier caso, él no va a tirar la toalla. Ya no. (Entrevista publicada por Nacho en Ruta 66)

Cuando Mr. Jones nos coge el teléfono, la conversación comienza con un pequeño reproche. “Esperaba tu llamada ayer a esta hora, amigo”. Me disculpo atropelladamente mientras busco el mail de la confirmación de la entrevista, pero ni siquiera da tiempo a explicarle que ha debido haber un error, que los datos me dan la razón. Hay confianza. “No importa, como sabes os tengo mucha estima, sólo te lo digo porque en un rato tendremos que hacer una pausa, estoy esperando a alguien y tendré que ir a recibirle. Comencemos, hay mucho de que hablar y tenía ganas ya de contároslo todo…”

Recuerdo el shock que fue el anuncio de la disolución de la Revue.. Pero que una banda se disuelva no significa necesariamente que haya fracasado, que no haya cumplido en sus objetivos… ¿o sí?

Lo que pasó es que algunos de los chicos del grupo se estaban cansando de salir tanto de gira, de estar continuamente fuera de casa durante tanto tiempo. No hemos parado en siete años, a veces con períodos de seis meses tocando todas las noches. Así que es normal que algunos necesitaran un descanso. Pero yo no lo necesito, ¡ja! Yo necesito estar siempre haciendo cosas, y justo coincidió que yo tenía varias canciones que no me encajaban para la Revue, y que los chicos querían parar. Así que vi que era el momento perfecto para comenzar un nuevo proyecto.JJRM_Gullick6873A!!

Dices que tu nuevo material no encajaba en la Revue, pero, ¿no hubiera sido una buena manera de enriquecer sus opciones sonoras?

Sí, sí, quizá… Pero es sólo que ocurrió así. El desarrollo de las cosas fue natural. Al escribir nuevo material, tenía un grupo de canciones que pertenecía claramente al viejo estilo de rock’n’roll de la Revue, y otro que tenía otro feeling. Y cuando estás tanto tiempo tocando un mismo estilo de música, llega un momento en el que necesitas hacer otra cosa. No soy unidimensional, si sabes a qué me refiero. Ni hacemos el mismo show cada noche. Un día seremos punk, otro rockabilly, otro honky tonk, otro psicodélicos… Mi personalidad tiene muchas dimensiones.

Eso explica que la nueva banda se haya puesto en marcha tan rápido.

Sí, como te digo siempre tengo mucha energía, muchas ganas de mover el culo… (suena un timbre). Perdona, mi invitado acaba de llegar (se le oye abrir una puerta y decir “I’m talking to the spanish guys” antes de volver al teléfono). Ya estoy aquí… Como te decía, necesito acción. Todo el tiempo.

Y tus nuevos compañeros, ¿cómo son en ese sentido? Y más importante, ¿entendieron tu particular forma de rockear desde el pricipio?

Sí, he tenido mucha suerte con eso. Yo tengo las ideas muy claras y necesito gente que también pueda verlas con facilidad. Por ejemplo, tocar el pedal steel requiere unas aptitudes y habilidades muy concretas, hay que ser un experto para saber tocarla en condiciones. Pero cuando busqué a alguien que lo hiciera, le dije que no quería que la tocara al estilo tradicional country-western, sino que la tocase como un creador de efectos cinematográficos, haciéndola parecer un theremin, o esto o lo otro. Soy muy exigente con mis músicos, porque quiero que sean muy buenos técnicamente pero que también sean capaces de desaprenderlo todo para poder experimentar a mi manera. No todo el mundo puede pasar por eso. Una de las cosas más difíciles fue sustituir a Herbert al piano (leer despiece), porque es un monstruo, un tipo con un don. Tuve mucha suerte encontrando a Joe Glossop (piano), Phil Martini (batería) y David Page (guitarra). Hicimos unos cuantos ensayos, dimos varios shows y… de repente un día llega Page, y me dice: “Lo siento Jim, sé que tenemos varias fechas fijadas, pero he estado grabando en un disco con The Ruin Brothers en California, con Rick Rubin, y me acaban de pedir que vuelva al trabajo. No puedo decirles que no”. Poco después, Glossop se me acercó y me dio la misma noticia: “Perdona Jim, me acaban de ofrecer salir de gira con alguien a quien no puedo rechazar… es Tom Jones”. Joder, al menos es un Jones. Eso fue lo que dije, ¡jajaja! Así que otra vez me vi buscando a dos miembros para el grupo. Lo bueno es que otra también volví a tener suerte, y enseguida di con Matt Millership (piano) y Malcolm Troon (pedal steel). Matt iba a ser originalmente el pianista de la Revue, pero estaba demasiado ocupado en aquel momento, y Malcolm ya ha tocado en otro grupo con Phil Martini, nuestro batería, así que ya se conocían de antes. Ha sido más complicado de lo esperado pero bueno… ¡ya tengo una banda de nuevo!

Qué ganas de veros en directo.

Oh tío, no puedo esperar, estoy loco de ganas de ir a tocar a vuestro país.

Por ahora sólo tenéis un EP, “Boil ‘yer blood”, cuyo título podría remitir perfectamente al feeling salvaje de la Revue. Pero hay otros colores, y eso que sólo son tres temas. ¿Cuántas canciones tendrá el setlist de vuestra gira?

Tenemos unas quince canciones grabadas, y vamos a tocarlas todas. Así que hay para una hora y media de concierto más o menos. El nuevo material es muy ecléctico, puede ser muy extremo, más loco incluso que la Revue, pero también puede ser onírico, o más groovie… Vamos a publicar otro EP en breve, llamado “Aldecide”.

¿Cuándo se publica el álbum completo?

En septiembre. Espero poder volver alguna vez más a España antes de que salga… es que me encanta, de verdad. En el País Vasco hay mucho rock’n’roll, también en Madrid…

El nombre del grupo, The Righteous Mind, viene de un libro de psicología que dice que las relaciones humanas están pervertidas por la política y la religión. Un poco obvio, ¿no?

Sí, pero no deja de fascinarme, en un sentido negativo, claro. La política y la religión son como una maldición para el ser humano. También me interesa mucho el tema del control y la manipulación que ejercen las corporaciones globales sobre la sociedad, ya que gracias a internet están saliendo bastantes cosas a la luz. Hace falta seguir sacando cosas a la luz, conocer la verdad. Por eso cuando vi el título de este libro me pareció perfecto.

En una de las canciones del EP te desgañitas de una forma especialmente salvaje, ¿nunca pierdes la voz?

Solía perderla en el pasado, en mis primeros tiempos con la Revue. En las primeras giras, a las dos semanas ya no podía más, porque me pasaba mucho fumando y bebiendo, así que un día decidí que tenía que dejar el tabaco, y beber menos alcohol. No sabes lo deprimente que puede ser estar de gira, viajando miles de kilómetros, sin probar una gota de alcohol. Pero tenía que decidir qué era más importante. Suena a cliché, pero elegí el rock’n’roll.

Suena aburrido, sí.

¡Jajajaja! ¡Sí, hay que sufrir por el arte!

Hablando de arte, ¿quién hizo el dibujo de la portada? Me gusta mucho.

Muchas gracias, lo hizo un artista, ilustrador y tatuador francés llamado Jean-Luc Navette. Vive en Lyon, pero es amigo mío desde hace mucho tiempo. Cuando le conté que estaba un nuevo proyecto, me pidió que le enseñara de qué iba, y se puso a trabar en una portada. Al principio me entregó una portada de álbum, que era genial, pero tuve que decirle que necesitaba una para EP.

En España tienes tres fechas, y en Francia nueve. ¿Por qué tanta diferencia?

Es porque el promotor francés contrató una segunda tacada de fechas, más a última hora.

Pensé que igual tenía que ver con los impuestos tan altos que hay a los espectáculos en nuestro país…

Conozco la situación, es terrible. Y encima, si quieres quejarte al Gobierno, primero tienes que pedir permiso para poder quejarte. He estado siguiendo un poco la situación política española.

¿Así que estás al tanto de los nuevos partidos políticos que han surgido? Uno emergió de las protestas en la calle.

Mmm, creo que no, me has pillado. ¿Qué tal están trabajando?

Pfff.. No comment.

Ya… Imagino lo que está pasando. El poder corrompe tan rápido que ni te das cuenta. Es realmente complicado encontrar a las personas adecuadas. Cuando crees que has encontrado al adecuado, enseguida te das cuenta de que no es más que otro bambú mecido por el viento.

Antes de despedirme, quería decirte que en el especial que publicamos por el 30 aniversario de la revista, hicimos una recopilación de 30 discos esenciales del canon rutero. Tú eres de los poquísimos que han colado dos: el debut de la Revue y “Soul, Glitter & Sin” de Thee Hypnotics.

¡Eso es fantástico! Os lo agradezco muchísimo. Vuestra revista es un canon rockero en sí misma, la aprecio mucho y esto significa mucho para mí, de verdad. Espero que puedas venir a saludarme cuando toquemos en Madrid… ¡y me traigas un ejemplar!

 

Boogie piano goes viral

Mientras me pongo en situación para la entrevista, vero que en su nueva banda no está el brutal pianista de la última formación de la Revue, Henri Herbert. “¿En qué anda ahora?”, apunto como pregunta para Jim. Pero decido buscar respuesta en google y… zas. Un vídeo de él tocando en mitad de la estación de King’s Cross-Saint Pancras de Londres supera los diez millones de reproducciones, y lo ha convertido en una estrella de internet. “Sí, es de locos”, suspira Jones cuando le comento mi estupefacción. “Se ha hecho tan famoso que ahora gana mucho más dinero tocando boogie en solitario que girando con un grupo de rock’n’roll. Él formaba parte de The Righteous Mind, estuvo trabajando conmigo en las canciones durante meses, iba a venir de gira, pero en cuanto colgó el vídeo se desató la locura. Un día se me acercó con cara de circunstancias, se disculpó y me dijo que estaba hecho polvo por tener que tomar esa decisión, que me había prometido formar parte de este proyecto, pero que su vídeo se había hecho viral y que le hacían ofertas irrechazables… Le deseé toda la suerte del mundo”.

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