Género: Folk – Pop – Rock
Sello: Bella Union / Music As Usual
9/10
Este álbum, ya un clásico de nuestro tiempo, fue editado en abril pero aún no habíamos publicado esta crítica. ¿Por qué ahora? Porque en breve veréis este disco situado en lo más alto de nuestra lista de lo mejor del año.
Con otra nueva colección de preciosas, extraordinarias canciones, unas como soles, otras como cielos estrellados, M. Ward encaja piezas de tres minutos que van del folk crepuscular al rock oldies e incluso esbozos de glam (deliciosa, extraordinaria versión del “Sweeheart” de Daniel Johnston) en un puzzle perfecto que se hace cortísimo, y que cumple como nunca la ley suprema que se ha autoimpuesto para dictar su idea del acabado perfecto: “el equilibrio natural entre luz y oscuridad”.
Ejercicios de estilo clásico elaborados con insultante talento (“I get ideas”), explosiones de energía atávica (“Primitive Girl”, “Me and my shadow”), melodías oníricas dibujadas sobre confesiones de fragilidad bañada en pura belleza (“The first time I ran away”), torturadas caminatas en la oscuridad (“Watch the show”), renaceres luminosos y sonrientes (“There’s a key”), todo presentado con un sonido puro y cristalino, un puente directo con la emoción de la interpretación instintiva, el único e ideal, se diría.
“A Wasteland Companion” es tan bello que resulta un álbum épico, es el mejor trabajo de la discografía de M. Ward, pero su exuberancia creativa es tan expansiva que resulta absolutamente verosímil no dudar de que sólo lo será hasta que publique el siguiente.
